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viernes, 30 de marzo de 2012

Espejismo social

A cada minuto aparece un síntoma. Esta costumbre de ser víctima en lugar de victimador difumina y confunde los caprichos con los vacíos reales del mundo exterior.
Somos seres que sabemos pretender en demasía y el castigo a eso es la decepción; ¿podrá ser la culpa el justificativo que necesitamos para aquello que no se nos concede?. Pareciera ser que buscamos que el mundo real no sea el que falla y pretendemos creer, a veces, que somos nosotros los que no estamos sintonizados.
"Estar adaptados a una sociedad profundamente enferma no es precisamente síntoma de buena salud" nos dice Jiddu Krishnamurti, y en verdad eso nos permite dudar de algunas decisiones que tomamos en este transitar.
Todos pasan envueltos en cortinajes porque mostrar debilidad quita poder, respeto, glamour, confianza, etcétera.
Y es que la sinceridad, la humanidad, la ausencia de revestimientos y la sensibilidad, ya no venden; y todos hemos aprendido a valorar a las personas de forma equivocada. Y por lo mismo, en contraposición, hemos adquirido la maña de conducirnos de cierta manera para incrementar nuestro "valor" frente al otro: ocultando pensamientos o ideas, modificando detalles o simulando actitudes y posturas; aprendiendo a ser ese que no se es para intentar recibir aquello que el otro ni siquiera tiene para darnos (parafraseando en ecuación a Jacques Lacán).
La sociedad nos ha vendido un simulacro continuado, los que terminan solos son los seres inadaptados. Los que aun creían que se los aceptaría siendo sinceros, los que no simulaban lo triunfal como pavo reales para seducir y triunfar, los que lamentaban públicamente sus errores pese a la consiguiente publicidad negativa; los melancólicos, los bohemios, los errabundos.
Pobres seres engañados y tan cortos de vista.

jueves, 29 de marzo de 2012

Algo de cine

El corto español "7:35 de la mañana"


Uno de los cortos mas frikis (freeky) que he visto en mi vida. dirigido por Nacho Vigalondo fue nominado a los oscars el 2004 - si no me equivoco.
Logré verlo gracias a unos compañeros el año pasado y en verdad lo disfruté. Hace poco lo recordamos de rebote con una amiga y decidí compartirlo con ustedes.

Pensar de acuario

No somos polvo, somos agua, de ahí vinimos y nuestra esencia líquida será desparramada en incontables panzas minúsculas, en alimento de fauna cadavérica, en vapores, en gases en secreciones finales que le deberán su sequedad a esta pérdida final de cohesión acuática.
Somos ese litro y medio de saliva diario
Esa decena de centilitros de lágrimas semanales
El contenido de nuestras 3 millones de glándulas sudoríparas
Los 39.000 litros de orina
A veces no sabemos sentir cómo cambiamos de estado, no sabemos sentir cómo el agua nos templa como espadas antiguas recién forjadas, como inmisericordes aceros toledanos listos para decapitar moros en batalla.
Fui un buen profesional toda mi vida. Una familia promedio: tres hijas; un ingreso promedio: lo suficiente; una casa promedio: cuatro habitaciones, sala, comedor, 3 baños, uno abajo y dos arriba, una linda cocina, un patio, siempre un par de mascotas; nunca gatos con aves, a veces perros con gatos.
El 80% de la gente no sabe que el agua es nuestra principal fuente de alimento, los animales nunca lo dudan.
El 71% de la superficie de la tierra está cubierta de agua
El 75% del cuerpo humano es agua
El 95% de una lechuga es agua
El 97% de una medusa también lo es.
Dos moléculas de hidrógeno y una de oxígeno constituyen el agua, y el hidrógeno es el elemento más común del universo, nada más parte del cosmos, nada más esencial.
Somos seres de agua , anfibios expulsados, antes peces, diminutas proteínas sintetizadas en el mar mucho antes de todo eso.
Dios es agua y el llanto de mi familia también lo será. Las lágrimas de mis hijas se harán sal al llegar al piso de madera. Mi esposa hidratará mis mejillas antes de entregarme al suelo.
Qué hermoso estar conectados ahora, a la única que aun le puedo ganar nadando es a mi mujer. En verdad me he puesto viejo sin darme cuenta.
Texto publicado en http://miercoles-de-ceniza.blogspot.com como parte de un ejercicio en el cual integramos nuestros relatos a imágenes específicas, en esa dirección podrán ver más.

martes, 27 de marzo de 2012

Voces (también afuera)

Frágil, fútil, retorcido. Descontexto acompasado, descontento, desmedro, desmedido.
¿Cómo puede ser tan voluble un espíritu y un simple tono tan incendiario?
Asco, confusión, persecución, cogito interruptus, desgano, despedace...
¿Cómo explicar la facilidad con la que la repugnancia se apodera de un día de fiesta? y ¿qué hay del retrogusto desagradable de un día normal hecho pedazos?
Alteración, desencanto, devalúo, duda, desconsuelo, flaqueza, pereza, desenfado.
En qué momento nos creemos capaces de juzgar el valor de los pensamientos de otra cabeza?, ¿Cuándo comenzamos a luchar por tener la razón y no por tener la certeza?
¿Se puede diferenciar pasividad de lógica?, ¿Entendimiento de tedio?... al menos, nomeimportismo de interés?
Las ratas beben a cántaros en las cloacas y a cántaros llueve y a cántaros se llenan los drenajes y las letrinas. Mientras las nubes se rompen, en el momento más inadecuado, parten, llenos del desperdicio de los desperdicios, esos roedores que atormentan; y parten hacia adentro en los silencios.
¿Hasta dónde cada mordida es real, hasta dónde es imaginaria? ¿De qué se trata este circo?, esta sombra tras el sol, tan mal montada.
Es tan chiquito uno que lo ve todo tan grande o tan crecido el otro que le resta importancia?

viernes, 23 de marzo de 2012

Día del Mar

De los aproximadamente 200 países que hay en nuestro planeta, los siguientes no tienen acceso al mar:
Afganistán, Andorra, Armenia, Austria, Azerbaiyán, Bielorrusia, Bután, Bolivia, Botsuana, Burkina Faso, Burundi, República Centroafricana, Chad, República Checa, Ciudad del Vaticano, Eslovaquia, Etiopía, Hungría, Kazajistán, Kirguistán, Laos, Lesoto, Liechtenstein, Luxemburgo, Macedonia, Malaui, Malí, Moldavia, Mongolia, Nepal, Níger, Paraguay, Ruanda, San Marino, Serbia, Suazilandia, Sudán del Sur, Suiza, Tayikistán, Turkmenistán,Uganda, Uzbekistán, Zambia y Zimbabue.
Es decir, un total de 40, que terminan siendo aproximadamente el 25% (la cuarta parte) de los países de la tierra.
Sin embargo, en Sud América, hay un país que no se resigna a ser parte de este grupo y vive en una continua lamentación por un enclaustramiento (producto de una usurpación bélica) que le hace, tal vez, sobrevalorar su desventaja geográfica.
Empeñado en el desespero de recuperar la soberanía frente a un vecino geopolíticamente geófago, nuestro país se atormenta con un pasado que no le permite proyectarse.
Uno nace en este país con la sensación de minusvalía y así se mutila desde la infancia la autoestima del boliviano que crece creyendo que tener esa nacionalidad es una desgracia o una calamidad (nada más equivocado).
Somos de un país privilegiado, donde se puede tener un almuerzo por un dólar, de donde parten las principales cuencas fluviales de todo un continente, con mucho espacio, con el color inimitable de las innumerables culturas amalgamadas, con gente de ciudad que aun puede darse el tiempo para conversar y no tiene tan crónico el mal post-moderno del stress o el aislamiento y que a nivel de recursos, riqueza natural y otras mil características, es simplemente incomparable; pero esto no lo sabemos valorar porque vivimos obsesionados viendo sólo las cosas que nos salen mal.
Así es, somos parte de un país que solamente necesita empezar a creer en si mismo.

Imagen: pérdidas territoriales (Instituto Geográfico Militar de Bolivia)

martes, 20 de marzo de 2012

Es un buen tipo mi viejo...

Hay todo tipo de padres, y así como hay padres que no parecen padres, hay padres que nunca supieron que lo son.
Pero también están los papás, los enserio. Los que hasta cansados, siguen ahí y saben sumergir sus propios fantasmas para regalar oxígeno a sus hijos aunque a ellos mismos les esté haciendo falta respirar.
Los seres humanos sabemos juzgar fácil y ligero. No nos detenemos a indagar en las razones que conducen a las personas a actuar por debajo de nuestras propias expectativas y de esta manera, cedemos protagonismo a nuestra soberbia y terminamos viendo sólo lo que queremos ver; lo que encaja con nuestra visión obtusa de algo, lo que nos permite llenarnos de bilis la boca.
Debido a esta horrorosa tendencia, pasa muy a menudo que juzgamos severamente a nuestros padres (mucho más que a nuestras madres) sin alcanzar a vernos reflejados en ese mismo sentir de omisiones y excesos por parte de sus apoderados. No sabemos ver sus insatisfacciones, sus frustraciones y faltas creyendo que ellos no fueron también esos hijos con expectativas insatisfechas. Y, somos de un juzgar tan fácil y ligero.
Implacables, inconscientes, así llenamos de bruma los lugares lúcidos del tiempo transcurrido junto a nuestros padres. Los miedos enfrentados gracias a su mano acompañante, los útiles consejos prácticos, las lecciones de matemáticas, la extraña curiosidad por la lectura, el ajedrez...
Mi padre, particularmente, supo siempre entablar amistad con las amistades que yo tuve. Extraño no aceptar con facilidad que también tuvo que haber entablado una amistad conmigo para lograr eso.
Como pasa siempre, cada uno será consciente de algunas cosas sólo cuando el espíritu le permita llevar ciertos elementos más allá de la razón hasta conseguir una comprensión casi intuitiva de ellas, comprensión que tal vez por ahora sigue vedada a nuestros ojos.
Siempre vamos a querer a nuestros padres, muy por encima del orgullo, de la negación y los complejos.
Porque la gratitud es en esencia justicia y porque su presencia en nuestra vida es digna de respeto y admiración: Felicidades papá!.

jueves, 15 de marzo de 2012

Sobre el XI Congreso Internacional de Críticos de Arte

Bajo la dirección de Walter Velázquez, el actor Gonzalo Alfonsín nos ofrece una obra en la que desfilan varios personajes que se ponen en riesgo a momento de interactuar profundamente con el público pero que no pierden su coherencia casi nunca, convirtiéndose en pilares de este “XI congreso internacional de críticos de arte”.
Con una escenografía que no necesita justificación por ser el detonante mismo (o al menos la excusa) para la entrada de cada uno de los personajes, la propuesta fluye aprovechando al máximo lo parodiable de los estereotipos extranjeros explotando la gran versatilidad y habilidad de Alfonsín para imitar acentos y prestarle un cuerpo y una actitud diferentes a los más de siete personajes que invaden la escena convocados para hablar sobre el cuadro “Rojo-amarillo-azul” de Kandinsky que los espera en escena.
Sin más artilugios, que unos pocos elementos que colaboran perfectamente en la caracterización de los diferentes personajes, el actor maneja y dosifica correctamente la gestualidad y la voz para acentuar las diferencias entre ellos y pasando de un estado a otro sin complicaciones.
El ritmo mantiene atento al público, teniendo sus cúspides en las interacciones con éste gracias a la habilidad de improvisación del actor, y la relación entre el tiempo real y el tiempo subjetivo sale a favor de la propuesta, pues no se percibe por demás extensa pese a su duración real (considerable tomando en cuenta de que se trata de un unipersonal).
Las excentricidades de los personajes se ponen en juego como parte de esta parodia que únicamente tiene un bache, irónicamente, en el personaje argentino (nacionalidad del actor) que tal vez no encontró eco en nuestro medio por tratarse de un homenaje a Federico Klemm – crítico de arte fallecido en el año 2003 – cuya universalidad podría haberse tomado simplemente desde el imaginario exterior que crea el estereotipo del gaucho o el porteño tan usados y difundidos.
Como quiera que sea y en resumen, la propuesta satisface, complace y divierte haciendo homenaje a Chaplin y su “gran dictador” en el personaje del crítico Alemán de apellido Volkswagen y reflejando la influencia y colaboración de Ana Prieto en su personaje chilango.
La obra presentada en “La Quimba Cultural” de calle Grau casi esquina Avaroa, no tuvo inconvenientes con lo reducido del espacio (así como no los tiene la gente del lugar, para ofrecer su escenario a los artistas que así lo solicitan) y nos permitió disfrutar de la actuación de Alfonsín en un ambiente íntimo dejándonos finalmente complacidos con un muy agradable espectáculo teatral.

Ficticio

Que hay tras cada paso detenido?
Las palabras se quedan cortas a menudo y el temor aflora en actos que fallan, en actitudes aturdidas que niegan y reniegan las decisiones más intimas atacadas por posturas asumidas que se resisten a la ruina inevitable de descubrir su naturaleza de estructuras que ya no cumplen su función.
Nuestra propia rigidez impide el redescubrimiento, y no reconocernos como seres diferentes a cada instante dificulta este continuo reinventarse. Somos intolerantes con nosotros mismos, no aceptamos nuestra dualidad interna y solemos prestar atención a uno sólo de nuestros hemisferios - regularmente al que hasta ahora funcionó - pero que sin el otro polo, pronto se desequilibra creándonos conflicto, desadaptación, frustración o arrepentimiento.
Dejamos pasar eventos, personas, situaciones, ideas, emociones y sensaciones por pura costumbre o neofobia creyendo que el hermetismo es en verdad funcional.
Aterrados por la magnitud de las posibilidades, preferimos los fatalismos a la esperanza y encontramos pronto lo que tememos en esa contradictoria invocación al miedo que deseamos evitar conjurándolo tanto.
El desprendimiento no puede nacer del temor a perder algo y preferir por ende no tenerlo en primera instancia. Esa renuncia apriori de aquello que nos corresponde es simple desconocimiento de lo que merecemos.
Entonces, incapaces de predecir el futuro, somos presas del azar porque nos han ensañado a ser pequeños.

sábado, 10 de marzo de 2012

Noche tras la llovizna

Vi a la luna husmeando desde los nubarrones que se levantaban al norte. Brillantes cubetas de agua limpia se disponían a llorar sobre nuestras cabezas. Tormenta de luz, de agua bañada en luna, de algodón de noche preñado de lluvia.
Pero el viento se llevó tempestades, y el llanto se detuvo luego de amenazar con sus gotas más avezadas.
Las nubes a contraluz se disiparon, se reabsorbieron en la noche, se retiraron en silencio y quedó sola la luna con su brillo. Las estrellas recomenzaron el barullo y los grillos trasnochados acompañaron ese titilar con sus alitas de campana afinadas en algún tono universal.
El olor a granizo se desvaneció, las pocas gotas que llegaron a caer, a esta altura de la noche eran perfume en la tierra húmeda ya sin sed. Las yerbas, a penas cuajando rocíos, se sumaron al escándalo aromático mientras una legión de amantes sin saberlo llenaban el ambiente de todo ese olor imperceptible que se destila de tanta sensación.
Polillas y libélulas eran parte de una danza iracunda e invisible que tenía como escenario el ras del suelo y los primeros metros de la noche pues los desventurados bailarines que en el frenesí buscaban mayor altura eran devorados por los danzantes mayores; esos implacables protagonistas nocturnos de alas membranosas y voces inaudibles.
La noche nunca está quieta, y tras la amenaza de aguacero, quedó la luz selenita enloqueciendo al mundo irónicamente relajado en sus excesos desatormentados.